viernes, 17 de julio de 2009

Felices los que...

"Felices los que tienen alma de pobres, porque a ellos les pertenece el Reino de los Cielos. Alégrense y regocíjense entonces, porque ustedes tendrán una gran recompensa en el cielo; de la misma manera persiguieron a los profetas que los precedieron." (Mt. 5, 3. 12)
Felices los que saben reírse de sí mismos, porque nunca terminarán de divertirse.



Felices los que saben escuchar y callar, porque aprenderán cosas nuevas.


Felices los que son suficientemente inteligentes como para no tomarse en serio, porque serán apreciados por quienes los rodean.



Felices los que están atentos a las necesidades de los demás sin sentirse indispensables, porque serán distribuidores de alegría.



Felices los que saben mirar con seriedad las pequeñas cosas, y con tranquilidad las cosas grandes, porque irán lejos en la vida.



Felices los que saben apreciar una sonrisa y olvidar un desprecio, porque su camino será pleno de sol.



Felices los que piensan antes de actuar y rezan antes de pensar, porque no se turbarán por lo imprevisible.

Felices ustedes si saben callar y ojalá sonreír cuando se les quita la palabra, se los contradice o cuando les pisan los pies, porque el Evangelio comienza a penetrar en sus corazones.



Felices sobre todo, ustedes, si saben reconocer al Señor en todos los que encuentran, entonces habrán hallado la paz y la verdadera sabiduría.


(Jorge Nardi, Mensajes Sanadores)

¡Jesucristo ha resucitado, verdaderamente ha resucitado!

1 comentario:

Pablo dijo...

Felices los misioneros que saben abandonarse y trabajar por el Reino de los Cielos.... Bendiciones